Virtud suprema Si yo fuera hombre, se codearían riendo, al verme como un viejo alce doblada la frente por el peso y la ramazón de la cornamenta que —aunque invisible— todos miran, puesta por ti, en mi cabeza. Pero como soy mujer, precisamente, la misma ven y loan unánimes, en admirativo coro, como diadema esplendorosa... Continue Reading →