Fusión
Me persigues ¡oh sombra!
con obstinación fría
atándome los puños
segándome la risa
parándome la sangre
y el pulso de la vida.
A tu viento tenaz
dócilmente me inclinas.
Te prolongas en mí
penetrando furtiva
mis silencios de yedra
mis murallas erguidas.
Ya mi voz no es mi voz
ni la tristeza es mía
ni sé ya qué raíz
está ardiendo en mi herida.… Leer más