Mi abuela perdía sus recuerdos como si destejiera prolijamente un tapiz prodigioso. Dulce, inevitablemente caían sus memorias en flores de un árbol vencido de veranos. Solía sentarse por las tardes a mirar el jardín por la ventana, lavada en presente. Mi hijita se sentaba junto a ella a habitar el momento, como si presintieran -como... Continue Reading →