El niño lucero
La luna está acariciando
en su regazo de plata
al lucero de la tarde
como en luminosa hamaca…
-Dame un beso mi lucero-
le dice la luna clara
y el lucero, que es su niño
le besa manos y cara.
Madre del lucero, ella
todas las tardes lo manda
que cuando el sol se retire
se asome por la ventana.
Madre luna, que bonito
es este collar de ágatas
que te pones por las noches
sobre tu cuello de garza…!
-Este collar que me dices
lo recogí una mañana
cuando bajaba a la mar
para bañarme en la playa-.
La luna lleva un vestido
todo de camelias blancas,
sus zapatitos tejidos
con hilos de mil arañas.
Una cofia de crespones
con chaquiras de esmeralda,
son luciérnagas dormidas
en su cabellera larga…
¡Ay, la luna que acaricia
en su regazo de plata
a su lucerito niño
en el amor de su hamaca…!
¡Ay, el lucerito claro
que tiene madre tan blanca
y le permite asomarse
a veces por la ventana…!
Lucero y luna han llegado
arriba de la montaña,
allí, en alcoba de sombras
tiende la luna su cama.
Y ya se cierran las puertas
de la noche sosegada
los párpados del lucero
cierran su carne de nácar.
-Madre, yo quiero dormir
en el amor de tu hamaca-.
La luna alarga los brazos,
llenos de camelias blancas…
y…allá en el oriente empiezan
las alondras su cantata.

María de la Luz Lafarja Urrutia, Lázara Meldiú, (Papantla, Veracruz, México, 9 de enero de 1902 – Ciudad de México, 4 de mayo de 1884). Poeta, sindicalista, editora y feminista pionera en la lucha feminista de la primera parte del siglo XX en México.
Desde muy joven y de manera autodidacta comenzó a escribir poemas. Después destacó por su activa participación en el sindicalismo magisterial y en la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios. Con otras 13 mujeres que representaban a más de 800 organizaciones femeninas de todo el país, constituyó el comité directivo del Frente Único Pro Derechos de la Mujer. Ahí trabajó con Esther Chapa, Frida Kahlo, entre otras.
El 17 de octubre de 1953, después de una lucha de más de veinte años entró en vigor la reforma constitucional que permitió la participación de las mujeres para votar y ser votadas en elecciones federales.
En la década de los 40 Lázara Meldiú fue una de las fundadoras del Ateneo Mexicano de Mujeres y de la publicación literaria-científica Ideas, la revista de las mujeres de América, en la que llegaron a escribir Simone de Beauvoir y Gabriela Mistral, entre otras intelectuales de la época.
Aunque se dedicó sobre todo a la poesía, publicó una novela corta de contenido social.
Hay un prestigioso premio en México que lleva su nombre : El Premio Nacional de poesía “Lázara Meldiú”
Obra: Flechas; Arrullo; Devoción al Quijote (1947); El dolor de la astilla; Columpio. Letras para niños (1952); Surcos en promesa (1957); Cinco sonetos vegetales (1957); Elogio del café (1965); La ciudad perfumada (1982); Canto en tres tiempos; Canción de cuna; Cántico; Elogio del maíz; Balcón sobre el mar; Vida, pasión y muerte de una rosa; Con la tierra que soy; Colinas en otoño; Carabela hacia la sombra; Ocarina de agosto; Ánforas de luna y de dolor; Manos ausentes.
Enlaces de interés :
http://cronistadepapantla.com/_prs/_fls/L_Meldiu.htm