12 Poemas de Silvina Ocampo

La vida infinita

A veces me pregunto, al escuchar
como un recuerdo ya, el zorzal cantar

en los fondos más dóciles del sueño,
qué persigue la vida en su diseño

y en qué nos tornaremos cuando nada
nos distinga del aire y de la oleada

del mar que baña orillas de la tierra
donde nacemos y algo nos destierra.… Leer más

8 Poemas de Nahui Olin

“Mi inconformidad es el tormento que me aísla y me desvía de la vida en la que la mediocridad limita la adaptación y encuentra conformidad”

Nahui Olin

La arena que cubre la pirámide de Bronce
es la arena de un desierto que aterra
—y cuando se levanta, pesa como una ola inmensa que aplasta—
y va subiendo hasta cubrir el bronce de la pirámide
—que no tiene espíritu—
Y su materia va sepultándose sin defensa alguna
bajo la fuerza de la arena de un desierto que aterra.… Leer más

Winétt de Rokha visual

Episodio del programa radial Barco de Papel dedicado a la poeta chilena Winétt de Rokha.



Naín Nómez comenta en la presentación de la edición crítica de la obra de Winnet de Roka: El Valle pierde su atmósfera.

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Poemas de Unica Zürn

“La libertad, una vez la abrazamos, nos atrapa para siempre, ya no nos suelta. La libertad habita en la soledad, en un mundo sin anclas y sin amarras, en el que nadie nos ayuda ni nos sostiene más que nosotros mismos.”

Unica Zürn

I
Todo esto ya existió,
otros hablaron de ello.… Leer más

8 Poemas de Djuna Barnes

Ocaso de lo ilícito

Tú, con tus largas y vacías ubres

y tu calma,

tu ropa blanca manchada y tus

flácidos brazos.

Con dedos saciados arrastrándose

en tus palmas.

Tus rodillas muy separadas como

pesadas esferas;

Con discos sobre tus ojos como

cáscaras de lágrimas,

y grandes lívidos aros de oro

atrapados en tus orejas.… Leer más

7 Poemas de Alice Rahon

Este caballo de mi infancia

Este caballo de mi infancia

encerrado en una cárcel de sal

asombrado por esa sal

en el cruce inexorable


el pájaro de mi niño

con filo de flecha

y de yeso blanco

que anda por la arena del alba

hacia atrás

borrando la huella de sus pasos

obeliscos del silencio

en el país que he perdido

donde ningún árbol con sus hojas

devana el viento


líneas del horizonte de la mano

y bailando la ronda del verbo jaula

caed todas en la mar de este espejo

donde solo se ve el cielo

Al Iztaccíhuatl

Señalada con el dedo como las estrellas

en los límites chorreantes del oro inhabitable

a la copa de los árboles sin volar

cuando en los flancos de las montañas

las casas de los hombres se calientan los costados

he llevado mi vida

como ese sol que se traslada de un muro a otro

en esta calle

bajo el balcón de la extranjera

llorando en sus cabellos

cuando el amaranto mece al viento

y cuando las rosas se elevan

las más altas torres del sentir

desde mis dedos

arqueados como el ala del gavilán

cae el pájaro fragata

solitario

cae

A méme la terre

En la noche del principio

la bruma dejó

su sangre

entre los labios salados

más allá de los ojos de sol

La sonrisa de la muerte

recostada en el camino

inesperada como el rostro del pasado

Para estos destinos paralelos

no hay línea en el horizonte

en donde reunirse o descansar

o huir de los peces crueles

de la angustia y la preocupación

Estos nadan en las orillas

de los oscuros ríos

que separan a los amantes

La sombra baja una escalera de sol

hasta el fondo de mi corazón

La sombra baja una escalera de sol

Hasta el fondo de mi corazón

Pienso en los amores castos y pensativos

de esos animales que se unen

como dándose la mano

Solitarias como los planetas

Solitarias como los planetas

en el espacio

como el niño dentro de su madre

islas cubiertas de árboles

aparecieron verdes por encima de la niebla

coronadas de casas

con blancas caras de ciego

La soledad le apretaba la garganta a los faros

en el crepúsculo lluvioso

Este día había vencido una vez más

a la esperanza

terminaba con un viento ocioso

que hacía batir las alas inmensas

de tul gris de los pájaros desarraigados

Un corazón batía perdido

al final de una estela inmóvil

Son esas rutas las que hay que seguir

para encontrar el camino

donde los marineros deslumbrantes

duermen bajo doscientos metros de agua

Noir animal

Encuentro de río

agua que viene de las nubes

y de los manantiales

agua que me une a tu destino

agua libre que nunca vuelve

a sus orígenes

último ropaje para mi miedo

atraída hacia ti con una argolla en la nariz

hasta esta muerte

como una gota de agua la noche

llamando hasta que nos levantemos

trampa del fuego para quemarlo todo

(Poema dedicado a su Valentine Penrose)

Grotte de bronze

Gruta de bronce
amplificador de las tempestades
de los dos hemisferios
donde las sombras no pueden morir
 
Limbos de fuentes no nacidas
de amores ahogados
bajo parejas de falsos amantes
falsos pensamientos
falsas ventanas
en las murallas de la noche
falsa virtud de los débiles
nuestros huesos encrespándose en el fuego
desierto calcinado de espera
donde reina la loca del espejo.… Leer más

10 Poemas de Marguerite Yourcenar

Sept poèmes pour une morte
Siete poemas para una muerta

I

Ceux qui nous attendaient, se sont lassés d´attendre,
et sont morts sans savoir que nous allions venir,
ont refermé leurs bras qu´ils ne peuvent plus tendre,
nous léguant un remords au lieu d´un souvenir.
Les prières, les fleurs, le geste le plus tendre,
sont des présents tardifs que Dieu ne peut bénir.… Leer más

Mascha Kaléko visual

Centro Sefarad Israel presenta el libro Hoja al viento, de la Editorial Tresmolins, una selección de la poesía de Mascha Kaléko que viaja por los tiempos de la difícil existencia judía del siglo XX: desde sus inicios como chispeante poeta urbana de la gran metrópoli, pasando por los poemas de la pérdida del hogar y del desarraigo, escritos en el exilio estadounidense, hasta los poemas del aislamiento existencial en Israel, en la última etapa de su vida, tras la muerte de su hijo y de su marido.… Leer más

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