Lo que sólo es poético mata la poesía…
V.Holan
Encuentro en el ascensor
Entramos en la cabina y estábamos allí solos los dos.
Nos miramos sin hacer otra cosa.
Dos vidas, un instante, la plenitud, la felicidad…
En el quinto piso ella bajó, y yo, que continuaba,
comprendí que nunca más la vería,
que era un encuentro de una vez para siempre
y que, aunque la hubiera seguido,
lo habría hecho como un muerto,
y que, si ella se hubiera vuelto hacia mí,
sólo hubiera podido hacerlo desde el otro mundo
Hay
Hay destinos
donde lo que carece de temblor no es sólido.
Hay amores
en los que el mundo no te basta, falta un pasito.
Hay placeres
en los que te castigas por el arte, pues el arte es pecado.
Hay momentos de mutismo
en que la boca de la mujer hace pensar que el pudor es sólo
cuestión de sexo.
Hay cabellos teñidos por un meteoro
donde es el diablo quien hace la raya.
Hay soledades
en las que miras sólo con un ojo y miras sólo sal.
Hay momentos de frío
en los que estrangulas palomas y te calientas con sus alas.
Hay momentos de gravedad
en los que sientes que has caído ya entre los que caen.
Hay silencios
que debes expresarlos tú, ¡precisamente tú!
Ella
La belleza es de Dios. Pero la belleza seduce.
Desde el hombre en el paraíso hasta el forense ocupado
en una prostituta asesinada,
nos culpa de la soledad,
nos promete a la mujer como futuro, tal
como si concibiese una eternidad posterior incluso a Dios,
nos atormenta después con nuestro pavor –
y cuando estamos celosos sonríe maliciosamente
hasta allí donde la nostalgia nos transforma en el goce del mal…
Comparada con la miseria -una certeza,
es demasiado vaga para hacer daño a los más…
¡Vista así, no observada!
Te ha preguntado
Te ha preguntado una muchacha: ¿Qué es poesía?
quisiste decirle: El hecho de que existes, sí, de que existes
y que con temor y asombro,
testimonios del milagro,
envidio dolorosamente la plenitud de tu belleza,
y que no puedo besarte ni dormir contigo
y que nada poseo, y que a quien no puede hacer regalos
no le queda más remedio que cantar.
Pero no se lo has dicho, te has callado
y ella no ha oído esta canción.
La voz humana
La piedra y la estrella no nos imponen su música,
las flores callan, las cosas parece que ocultan algo.
Los animales niegan en sí, por nuestra causa,
la armonía de la inocencia y el misterio.
El viento tiene siempre el pudor de una simple señal
y lo que es el canto, lo saben sólo los pájaros enmudecidos
a los que el día de Nochebuena echaste una gavilla sin trillar.
Les basta existir y eso es inexpresable. Pero nosotros,
nosotros sentimos miedo, y no sólo en la oscuridad,
sino que, incluso en la fecunda luz,
no vemos a nuestro prójimo
y aterrados hasta un conjuro violento
gritamos: ¿Estás ahí? ¡Habla!
» Pero existe la música”Versión de Clara Janés
Cuando llueve en domingo y tú estas solo
Cuando llueve en domingo y tú estás solo,
completamente solo,
abierto a todo, pero no llega ni el ladrón
y no llama a la puerta ni el borracho ni el enemigo;
cuando llueve en domingo mientras tú estás abandonado
y no comprendes cómo vivir sin cuerpo
y cómo no vivir puesto que tienes cuerpo;
cuando llueve en domingo y, solo, no eres más que tú,
¡no esperes ni hablar contigo mismo!
Entonces el ángel es el único que sabe
lo que hay encima de él,
entonces el diablo es el único que sabe
lo que hay debajo de él.
El libro sostenido, el poema al caer…
En la profundidad de la noche
a Jaroslav Seifert
«¿Cómo no ser?», te preguntas y hasta acabas por decirlo
en voz alta…
Pero el árbol y la piedra lo callan ,
aunque ambos son hijos de la palabra y por tanto mudos,
ya que la palabra se asusta de ver lo que ha sido de ella…
Pero los nombres aún los tienen. Los nombres: pino,
arce, álamo temblón. ..y los nombres: feldespato,
basalto, fonolita, amor… Bellos nombres,
sólo que asustados de ver en qué se han convertido.
Versión de Clara Janés
No es
No es indiferente el lugar donde estamos.
Algunas estrellas se acercan entre sí peligrosamente.
También aquí abajo hay separaciones violentas de amantes
sólo para que el tiempo se acelere
con el latido de su corazón.
Las gentes sencillas son las únicas que no buscan la felicidad…
«He defendido la libertad ardiendo de deseo y asombro / y aunque no haya conocido más que la visión sin la revelación / he sido tan fiel que me he convertido en testigo»
V. Holan
Enlaces de interés:
http://www.mcnbiografias.com/app-bio/do/show?key=holan-vladimir
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