Gaceta oficial de la policia
Mi abuelo deja su cáliz de plata con un golpe.
Clarifica un silencio
en medio del parloteo de la familia
para hacer comentarios sobre el vino.
Hace calor. Jesús está muriendo de calor.
Allá yace sobre la pared
del sórdido tribunal
intentando que llegue aire a sus sobacos.
El juez se pasa un dedo
entre el cuello y el collar—
dicta sentencia.
Amame este primer día de junio.
Preferiría dormir entre cenizas
que con sabiduría clerical.
De todos los lugares solitarios de este mundo
este es el mejor
aquí los escombros son humanos.
Beso las preciosas cenizas
que caen de ardientes carnes
Sobre estas formas familiares
deposito mis besos.
Hitler vive.
Tiene catorce años de edad.
No se afeita.
Quiere ser arquitecto.
La primera estrella de esta noche
enloquecidamente lejana, virginal, serena.
Tengo una hora de paz
antes de que los documentados planetas
me abrasen.
Police Gazette
My grandfather slams the silver goblet down.
He clears a silence
in the family talk
to comment on the wine.
It’s hot. Jesus is dying of heat.
There he lies on the wall
of the sordid courtroom
trying to get air into his armpits.
Judge runs a finger
between neck and collar –
hands the sentence down.
Love me this first day of June.
I’d rather sleep with ashes
than priestly wisdom.
Of all the lonely places in the world
this is best
where debris is human.
I kiss the precious ashes
that fall from fiery flesh.
On these familiar shapes
I lay my kisses down.
Hitler is alive.
He is fourteen years old.
He does not shave.
He wants to be an architect.
The first star tonight
insanely high, virgin, calm.
I have one hour of peace
before the documented planets
burn me down.
De : Flores para Hitler. Editorial: VISOR(2005)Traductor: RESINES, ANTONIO
Whati’m doing here
I do not know if the world has lied
I have lied
I do not know if the world has conspired against love
I have conspired against love
The atmosphere of torture is no comfort
I have tortured
Even without the mushroom cloud
still I would have hated
Listen
I would have done the same things
even if there were no death
I will not be held like a drunkard
under the cold tap of facts
I refuse the universal alibi
Like an empty telephone booth passed at night
and remembered
like mirrors in a movie palace lobby consulted
only on the way out
like a nymphomaniac who binds a thousand
into strange brotherhood
I wait
for each one of you to confess
Que hago aquí
No sé si el mundo ha mentido
Yo he mentido
Yo no sé si el mundo ha conspirado contra el amor
Yo he conspirado contra el amor
El clima de tortura no constituye ningún consuelo
Yo he torturado
Aunque no hubiera existido la nube en forma de hongo
habría odiado
Escuchadme
Yo habría hecho las mismas cosas
aunque no existiera la muerte
Me niego a que se me sujete como a un borracho
bajo el frío grifo de los hechos
Yo rechazo la coartada universal
Como una cabina telefónica vacía junto a la que se pasa una noche
recordada
como los espejos del salón de un cine que tan sólo son consultados
al salir
como un ninfomaníaco que ata a un millar
en una extraña hermandad
Yo espero
a que cada uno de vosotros confiese
De : Flores para Hitler. Editorial: VISOR(2005)Traductor: RESINES, ANTONIO
The first murder
I knew it never happened
There was no murder in the field
The grass wasn’t red
The grass was green
I knew it never happened
I’ve come home tired
My boots are streaked with filth
What good to preach
it never happened
to the bodies murdered in the field
Tell the truth I’ve smoked myself
into love this innocent night
It never happened
It never happened
There was no murder in the field
There was a house on the field
The field itself was large and empty
It was night
It was dead of night
There were lights in the little windows
El primer asesinato
Supe que no había ocurrido
No había asesinato en la pradera
La hierba no estaba roja
La hierba era verde
Supe que no había ocurrido
He llegado a casa cansado
Mis botas están veteadas de suciedad
Para qué sirve predicar
nunca les pasó nada
a los cuerpos asesinados en la pradera
Decid la verdad he fumado hasta
llegar al amor en esta noche inocente
Jamás ocurrió
Jamás ocurrió
No hubo asesinatos en la pradera
Había una casa en la pradera
La pradera en sí era grande y estaba vacía
Era de noche
Era noche cerrada
Había luces en las diminutas ventanas.
De : Flores para Hitler. Editorial: VISOR(2005)Traductor: RESINES, ANTONIO
.
To a man who thinks he is making an angel
Drop the angel out of your silver spoon
You’ll never get it to your mouth
You’re not dealing with the moon anymore
or corkscrew unicorns
The moon you kept in a cup
herds of magic beasts in your pocket
but this real angel knocks down factories
with a wisp of hair
Do you think your arms are wide enough
to cramp her in your heritage
you with your iron maidens
brimstone ponds where only sufferers sing
Do you think she’s from Chartres you turd
From Notre Dame out of any church you know
or even out of some humble inflamed mystic’s mind
She is from a service you have never heard
Ah but she stops my mouth from further curses
covering my whole heaving body with one of her molecules
A un hombre que cree que esta haciendo un Angel
Deja caer el ángel de tu cuchara de plata
Jamás conseguirás llevarlo hasta tu boca
Ya no estás tratando con la luna
o con unicornios de cuerno de sacacorchos
Mantenías a la luna en una taza
rebaños de mágicas bestias en tu bolsillo
pero este ángel auténtico derriba fábricas
con un mechón de cabello
Acaso crees que tus brazos son lo suficientemente largos
como para inmovilizarla con fuerza en tu herencia
tú con tus damas de hierro
estanques de azufre donde sólo cantan los sufrientes
Acaso crees que ella es de Chartres pedazo de excremento
De Notre Dame de cualquier iglesia que tú conozcas
o incluso de alguna humilde mente inflamada de místico
Ella procede de un servicio del que tú ni siquiera has oído hablar
¡Ah! pero ella detiene en mi boca ulteriores maldiciones
cubriendo la totalidad de mi jadeante cuerpo con una de sus
moléculas.
De : Flores para Hitler. Editorial: VISOR(2005)Traductor: RESINES, ANTONIO
Leonard y Suzanne Elrod (photo courtesy of Danny Fields)
Independence
Tonight I will live with my new white skin
which I found under a millennium of pith clothing
None of the walls jump when I call them
Trees smirked you’re one of us now
when I strode through the wheat in my polished boots
Out of control awake and newly naked
I lie back in the luxury of my colour
Somebody is marching for me at me to me
Somebody has a flag I did not invent
I think the Aztecs have not been sleeping
Magic moves from hand to hand like money
I thought we were the bank the end of the line
New York City was just a counter
the crumpled bill passed across
I thought that heroes meant us
I have been reading too much history
and writing too many history books
Magic moves from hand to hand and I’m broke
Someone stops the sleepwalker in the middle of the opera
and pries open his fist finger by finger
and kisses him goodbye
I think the Aztecs have not been sleeping
no matter what I taught the children
I think no one has ever slept but he
who gathers the past into stories
Magic moves from hand to hand
Somebody is smiling in one of our costumes
I think that is what invisible means
July 4, 1963
Independencia
Esta noche viviré con mi piel blanca nueva
que encontré bajo un milenio de ropajes del tuétano
Ninguna de las paredes saltan cuando las llamo
Los árboles sonrieron maliciosamente ahora eres uno de nosotros
cuando caminé a través del trigo con mis botas abrillantadas
Descontrolado despierto y recién desnudo
me recuesto en el lujo de mi color
Alguien marcha por mí contra mí hacia mí
Alguien tiene una bandera que yo no inventé
Creo que los Aztecas no han estado dormidos
La magia corre de mano en mano como el dinero
Creía que éramos el banco que había al final de su viaje
Nueva York no era más que un mostrador
a través del cual pasaba el arrugado billete
Yo pensaba que lo de héroes se refería a nosotros
He estado leyendo demasiada historia
y escribiendo demasiados libros de historia
La magia corre de mano en mano y yo estoy en la ruina
Alguien detiene al sonámbulo en medio de la ópera
y abre su crispado puño dedo a dedo
y le da un beso de despedida
Creo que los Aztecas no han estado durmiendo
no importa lo que les haya enseñado a los niños
Creo que nadie ha dormido jamás salvo aquel
que recoge el pasado en historias
La magia corre de mano en mano
Alguien está sonriendo en uno de nuestros disfraces
Alguien se está quitando un disfraz
Creo que eso es lo que es lo que significa la invisibilidad
4 julio, 1963
De : Flores para Hitler. Editorial: VISOR(2005)Traductor: RESINES, ANTONIO
The flowers that I left in the ground
The flowers that I left in the ground,
that I did not gather for you,
today I bring them all back,
to let them grow forever,
not in poems or marble,
but where they fell and rotted.
And the ships in their great stalls,
huge and transitory as heroes,
ships I could not captain,
today I bring them back
to let them sail forever,
not in model or ballad,
but where they were wrecked and scuttled.
And the child on whose shoulders I stand,
whose longing I purged
with public, kingly discipline,
today I bring him back
to languish forever,
not in confession or biography,
but where he flourished,
growing sly and hairy.
It is not malice that draws me away,
draws me to renunciation, betrayal:
it is weariness, I go for weariness of thee,
Gold, ivory, flesh, love, God, blood, moon-
I have become the expert of the catalogue.
Las flores que dejé en el suelo
Las flores que dejé en el suelo,
que no junté para vos,
hoy las traigo de vuelta,
para dejarlas crecer eternamente,
no en poemas o en mármol,
sino donde cayeron y se pudrieron.
Y los barcos en sus grandes puestos,
enormes y transitorios como héroes,
barcos que no pude comandar,
hoy los traigo de vuelta
para dejarlos navegar eternamente,
no en maqueta o en balada,
sino donde naufragaron y se hundieron.
Y el niño sobre cuyos hombros estoy,
cuyo anhelo purgé
con pública, realista disciplina,
hoy lo vuelvo a traer
para que languidezca eternamente,
no en confesión o en biografía,
sino donde floreció,
creciendo astuto y peludo.
No es malicia lo que me aleja,
lo que me arrastra a la renuncia, a la traición:
es por cansancio, me voy por estar cansado de vos.
Oro, marfil, carne, amor, Dios, sangre, luna.
Me convertí en un experto del catálogo.
LEONARD COHEN PREMIO PRÍNCIPE DE ASTURIAS DE LAS LETRAS 2011
Majestad,
Altezas,
Excelentísimas e Ilustrísimas autoridades,
Miembros del Jurado,
Distinguidos premiados,
Señoras y señores,
Es un gran honor estar aquí ante ustedes esta noche. Quizás, como el gran maestro Riccardo Muti, no estoy acostumbrado a estar ante un público sin orquesta tras de mí, pero lo haré lo mejor que pueda como artista en solitario hoy.
Anoche me quedé en vela, pensando qué podía decir aquí, en esta asamblea de distinguidas personas. Y después de comerme todas las chocolatinas, todos los cacahuetes del minibar, garabateé unas pocas palabras. No creo que tenga que hacer referencia a ellas. Obviamente, estoy muy emocionado por ser reconocido por la Fundación. Pero he venido aquí esta noche para expresar otra dimensión de mi gratitud; creo que puedo hacerlo en tres o cuatro minutos y voy a intentarlo.
Cuando estaba haciendo el equipaje en Los Ángeles, tenía cierta sensación de inquietud porque siempre he sentido cierta ambigüedad sobre un premio a la poesía. La poesía viene de un lugar que nadie controla, que nadie conquista. Así que me siento como un charlatán al aceptar un premio por una actividad que yo no controlo. Es decir, si supiera de dónde vienen las buenas canciones, me iría allí más a menudo.
Mientras hacía el equipaje, cogí mi guitarra. Tengo una guitarra Conde que está hecha en el gran taller de la calle Gravina, 7, en España. Es un instrumento que adquirí hace más de 40 años. La saqué de la caja, la alcé, y era como si estuviera llena de helio, era muy ligera. Y me la acerqué a la cara, miré de cerca el rosetón, tan bellamente diseñado, y aspiré la fragancia de la madera viva. Ya saben que la madera nunca llega a morir. Inhalé la fragancia del cedro, tan fresco como el primer día que adquirí la guitarra. Y una voz parecía decirme: “Eres un hombre viejo y no has dado las gracias, no has devuelto tu gratitud a la tierra de donde surgió esta fragancia”. Así que vengo hoy, aquí, esta noche, a agradecer a la tierra y al alma de este pueblo que me ha dado tanto. Porque sé que un hombre no es un carnet de identidad y un país no es solo la calificación de su deuda.
Ustedes saben de mi profunda conexión y confraternización con el poeta Federico García Lorca. Puedo decir que cuando era joven, un adolescente, y buscaba una voz en mí, estudié a los poetas ingleses y conocí bien su obra y copié sus estilos, pero no encontraba mi voz. Solamente cuando leí, aunque traducidas, las obras de Federico García Lorca, comprendí que tenía una voz. No es que haya copiado su voz, yo no me atrevería a hacer eso. Pero me dio permiso para encontrar una voz, para ubicar una voz, es decir, para ubicar el yo, un yo que no está del todo terminado, que lucha por su propia existencia. Y conforme me iba haciendo mayor comprendí que con esa voz venían enseñanzas. ¿Qué enseñanzas eran esas? Nunca lamentarnos gratuitamente. Y si uno quiere expresar la grande e inevitable derrota que nos espera a todos, tiene que hacerlo dentro de los límites estrictos de la dignidad y de la belleza.
Y entonces ya tenía una voz, pero no tenía el instrumento para expresarla, no tenía una canción.
Y ahora voy a contarles muy brevemente la historia de cómo conseguí mi canción.
Porque era un guitarrista mediocre, aporreaba la guitarra, solo sabía unos cuantos acordes. Me sentaba con mis amigos, mis colegas, bebiendo y cantando canciones, pero en mil años nunca me vi a mí mismo como músico o como cantante.
Pero un día, a principios de los 60, estaba de visita en casa de mi madre en Montreal. Su casa está junto a un parque y en el parque hay una pista de tenis y allí va mucha gente a ver a los jóvenes tenistas disfrutar de su deporte. Fui a ese parque, que conocía de mi infancia, y había un joven tocando la guitarra. Tocaba una guitarra flamenca y estaba rodeado de dos o tres chicas y chicos que le escuchaban. Y me encantó cómo tocaba. Había algo en su manera de tocar que me cautivó. Yo quería tocar así y sabía que nunca sería capaz.
Así que me senté allí un rato con los que le escuchaban y cuando se hizo un silencio, un silencio apropiado, le pregunté si me daría clases de guitarra. Era un joven de España, y solo podíamos entendernos en un poquito de francés, él no hablaba inglés. Y accedió a darme clases de guitarra. Le señalé la casa de mi madre, que se veía desde las pistas de tenis, quedamos y establecimos el precio de las clases.
Vino a casa de mi madre al día siguiente y dijo: “Déjame oírte tocar algo”. Yo intenté tocar algo, y él dijo: “No tienes ni idea de cómo tocar, ¿verdad?”. Yo le dije: “No, la verdad es que no sé tocar”. “En primer lugar déjame que afine la guitarra, porque está desafinada”, dijo él. Cogió la guitarra y la afinó. Y dijo: “No es una mala guitarra”. No era la Conde, pero no era una guitarra mala. Me la devolvió y dijo: “Toca ahora”. No pude tocar mejor, la verdad.
Me dijo: “Deja que te enseñe algunos acordes”. Y cogió la guitarra y produjo un sonido con aquella guitarra que yo jamás había oído. Y tocó una secuencia de acordes en trémolo, y dijo: “Ahora hazlo tú”. Yo respondí: “No hay duda alguna de que no sé hacerlo”. Y él dijo: “Déjame que ponga tus dedos en los trastes”, y lo hizo “y ahora toca”, volvió a decir. Fue un desastre. “Volveré mañana”, me dijo.
Volvió al día siguiente, me puso las manos en la guitarra, la colocó en mi regazo, de manera adecuada, y empecé otra vez con esos seis acordes –una progresión de seis acordes en la que se basan muchas canciones flamencas–. Lo hice un poco mejor ese día. Al tercer día la cosa, de alguna manera, mejoró. Yo ya sabía los acordes. Y sabía que aunque no podía coordinar los dedos para producir el trémolo correcto, conocía los acordes, los sabía muy, muy bien.
Al día siguiente no vino, él no vino. Yo tenía el número de la pensión en la que se hospedaba en Montreal. Llamé por teléfono para ver por qué no había venido a la cita y me dijeron que se había quitado la vida, que se había suicidado.
Yo no sabía nada de aquel hombre. No sabía de qué parte de España procedía. Desconocía porqué había venido a Montreal, porqué se quedó allí. No sabía porqué estaba en aquella pista de tenis. No tenía ni idea de porqué se había quitado la vida. Estaba muy triste, evidentemente.
Pero ahora desvelo algo que nunca había contado en público. Esos seis acordes, esa pauta de sonido de la guitarra han sido la base de todas mis canciones y de toda mi música. Y ahora podrán comenzar a entender las dimensiones de mi gratitud a este país.
Todo lo que han encontrado de bueno en mi trabajo, en mi obra, viene de este lugar. Todo lo que ustedes han encontrado de bueno en mis canciones y en mi poesía está inspirado por esta tierra.
Y, por tanto, les agradezco enormemente esta cálida hospitalidad que han mostrado a mi obra, porque es realmente suya, y ustedes me han permitido añadir mi firma al final de la página.
Muchas gracias, señoras y señores.
**********
Leonard Norman Cohen (Montreal, Canadá, 21 de septiembre de 1934 – Westmount, Canadá 7 de noviembre de 2016). Poeta, novelista, compositor, músico y cantautor. Premio Príncipe de Asturias de las letras 2011.
Nació en una familia de clase media judía. Su madre, Marsha Klonitsky era hija del rabino Solomon Klonitsky-Kline; su padre, Nathan Cohen, era nieto de Lazarus Cohen, procedente de Lituania, llegó a Canadá a mediados del siglo XIX y fundó una compañía carbonera y una importante empresa textil. La familia incluía destacados rabinos, un gramático hebreo, y pronto presidirían sinagogas, hospitales, bibliotecas y periódicos. Así pues, Leonard fue educado en la tradición de la religión judaica de un modo natural. En hebreo, Cohen significa “sacerdote”, es decir, representante de Dios que administra la ley sagrada; su primer nombre, Leonard -Eliezer en hebreo-, significa “Dios es mi ayuda”, mientras el segundo, Norman, es la forma anglicanizada de Nehemías, “el reconstructor de Jerusalén”.
El padre falleció cuando Leonard tenía nueve años.
Cohen estudió en la Roslyn Elementary School y, desde 1948, en la Westmount High School, donde se involucró en el consejo de estudiantes y estudió música y poesía. Al poco tiempo y durante su adolescencia, comenzó a interesarse por la poesía de Federico García Lorca. Aprendió a tocar la guitarra y formó The Buckskin Boys, un grupo de country-folk. Aunque comenzó tocando una guitarra acústica, pronto pasó a tocar una guitarra clásica, tras conocer a un joven guitarrista español apodado “El Hispano de Montreal”, quien le dio unas clases de guitarra: “Aquello cambió mi manera de ser y de pensar de un modo radical”, diría Cohen, que desde ese momento se consagró a sus nuevas vocaciones: la música y la poesía. En esa época Cohen leía su poesía en varios clubes de los alrededores del barrio obrero de Little Portugal en Saint-Laurent Boulevard.
En 1951, Cohen ingresó en la Universidad McGill de Montreal, donde llegó a ser presidente del Canadian University Society for Intercollegiate Debate y ganó el Chester Macaghten Literary Competition por los poemas «Sparrows» y «Thoughts of a Landsman». En marzo de 1954 publicó sus primeros poemas en la revista CIV/n.
Tras graduarse en 1955, Cohen pasó un año en la Facultad de Derecho de McGill, y otro año en la Escuela de Estudios Generales de la Universidad de Columbia. Su primer libro de poesía, Let Us Compare Mythologies (1956), fue publicado por Dudek como el primero de la serie McGill Poetry, un año después de su graduación. El libro contenía «poemas escritos cuando Cohen tenía entre quince y veinte años», y estaba dedicado a su padre.
Abandonó Nueva York y volvió a Montreal en 1957, donde trabajó en diversos oficios y se enfocó en la escritura de poesía y ficción, incluyendo los poemas de su siguiente libro, The Spice-ox of Earth (1961), el primero publicado por la editorial canadiense McClelland & Stewart.Este libro le ayudó a obtener el reconocimiento de la crítica como una nueva voz en la poesía canadiense.
A lo largo de la década de 1960, Cohen continuó escribiendo poesía y ficción.
El 14 de abril de 1960 fue la primera vez que Leonard Cohen pisó el puerto de Hydra, una pequeña isla griega del mar Egeo donde no había teléfonos ni electricidad regular. Leonard Cohen, entonces un joven escritor canadiense que había viajado a Europa con una beca, oyó hablar de ese lugar en una fiesta en Londres y decidió ir allí en busca de tranquilidad e inspiración para escribir.
Leonard sabía que la isla era el reducto de un grupo de artistas y escritores expatriados.Tal fue la impresión que le produjo el lugar que el 27 de septiembre del mismo año, seis días después de su 26 cumpleaños, Cohen compró allí una casa por 1.500 dólares gracias a una pequeña herencia de su abuela. Algunos de los componentes de la comunidad bohemia de la isla, eran la escritora australiana Charmail Cliftt y su marido el escritor australiano George Johnston -ambos regalaron a Leonard Cohen varios muebles para su nueva casa. También vivían el escritor nourego Axel Jensen y su mujer Marianne Ihlen así como el escritor sueco Göran Tunström entre otros. Los hermanos Anthony y Nick Katsikas regentaban una pequeña tienda de comestibles en el puerto de Hydra que también era bar y lugar de encuentro para muchos. Allí fue donde Leonard Cohen, ofreció su primer concierto y conoció a quien seria musa y gran amor, Marianne. La joven noruega Marianne Inhlen. Ella había llegado a la isla con su marido, el escritor Axel Jensen, al que llamaban «el Kerouac noruego», y tenían un hijo también llamado Axel. Jensen era un tipo dado a violentos ataques de ira, que engañaba a Marianne en nombre del amor libre y la acabó abandonando. Entonces entró en escena Cohen, que se convirtió en amante de Marianne. La bella noruega a la que dedicó la canción So Long, Marianne. Siete años de romance, con sus altos y sus bajos, sirvieron para que Marianne se convirtiese en la musa de Leonard Cohe. «Conmigo publicó tres libros de poemas y dos de novela. Era extremadamente creativo», dijo ella en una entrevista.
Leonard y Marian en Hydra
Durante su estancia en Hydra, publicó la colección de poesías Flowers for Hitler (1964) y las novelas The Favourite Game (1963) y Beautiful Losers (1966). El mismo año, también publicó Parasites of Heaven, otro libro de poemas. Uno de los poemas lleva por título precisamente Hidra 1960 y refleja muy bien la vida relajada de la isla: «Todo lo que se mueve es blanco / una gaviota, una ola, una vela / y se mueve con demasiada pureza para ser imitado…». Un poema posterior, Days of kindness, dice: «Grecia es un buen lugar / para mirar la luna, ¿verdad? / Puedes leer a la luz de la luna, / puedes leer en la terraza. / Puedes ver una cara / como la veías cuando era joven…».
En 1967, después de casi una década, decepcionado por su falta de éxito como escritor, Cohen se trasladó a los Estados Unidos para comenzar una carrera como cantautor folk. Tras tocar en varios festivales de folk, John H. Hammond, representante de Columbia Records, que años antes fichó a Bob Dylan, se interesa por Cohen. El primer álbum de Cohen con Columbia fue Songs of Leonard Cohen (1967) con el cual obtuvo un notable éxito en Estados Unidos y en Reino Unido. Su canción «Suzanne» fue un notable éxito de la mano de Judy Collins, y durante muchos años fue su canción más versionada. Suzanne Verdal fue quien inspiró al cantautor con la canción que terminaría por darle fama como músico. Sin embargo su relación con ella nunca fue carnal. Eran muy bueno amigos. Tanto que incluso adivinaban los pensamientos el uno del otro sin necesidad de articular palabra. Cuando se conocieron Suzanne, que era bailarina profesional, estaba casada con uno de los mejores amigos de Cohen y se convirtió en una mujer inalcanzable. Ni siquiera cuando ésta se divorcio tuvieron contacto físico. En cambio, la profunda admiración entre ambos inspiró algunas de las letras de las canciones del intérprete.
Posteriormente, publicó menos poesía y se concentró en su creciente carrera musical. Tras A Songs of Leonard Cohen siguieron los álbumes Songs from a Room (1969) y Songs of Love and Hate (1971).
En 1970, Cohen salió por primera vez de gira por los Estados Unidos, Canadá y Europa, y actuó en el Festival de la Isla de Wight. Dos años después, volvió a salir de gira por Europa e Israel con amigos como Charlie Daniels y el productor Johnston. Ambas giras estuvieron representadas en el álbum Live Songs. En 1972 nació su hijo Adam, y en 1974 su hija Lorca -en honor al poeta granadino- fruto de su relación con Suzanne Elrod.
En 1974 comenzó una asociación musical con el pianista y arreglista John Lissauer. Ambos salieron de gira por Europa, Estados Unidos y Canadá entre finales de 1974 y comienzos de 1975, en apoyo del nuevo álbum de Cohen, New Skin for the Old Ceremony, producido y arreglado por el propio Lissauer. A finales de 1975, Cohen y Lissauer llevaron a cabo una serie de conciertos en Norteamérica con una nueva banda, en los que incluyó nuevas canciones para un álbum en progreso, coescrito por Cohen y Lissauer y titulado Songs for Rebecca.
En 1978, Cohen publicó Death of a Lady’s Man, su primer libro de poesía en varios años, y hasta 1984 no finalizó su siguiente libro, Book of Mercy, que obtuvo el premio Canadian Authors Association Literary Award a la poesía. Book of Mercy incluyó cincuenta poemas influidos por escritos Zen y por el Talmud, a los que el propio músico se refirió como «oraciones».
A comienzos de la década de 1980, Cohen coescribió el documental musical Night Magic con Lewis Furey. En 1981, se trasladó al sur de Francia y se instaló en una caravana aparcada en las afueras de la casa que había comprado para Suzanne y sus hijos, donde empezó a estudiar el Talmud. Durante varios meses emborronó una serie de oraciones y salmos que yuxtaponían zen y judaísmo en un cuaderno destinado a convertirse en “Libro de misericordia” (Book Of Mercy), 1984, obra que revelaba una devocional etapa hacia una vía claramente espiritual. Para la publicación del que seria su séptimo libro de poemas Cohen diseñó un símbolo » el Corazón Unificado» (“Unified Heart”). Este símbolo diseñado por el propio autor fué empleado por primera vez para ilustrar la cubierta de El libro de la misericordia (Book of Mercy, 1984).
Su representación es la de un hexagrama (muy vinculado a la Estrella de David judía), al que se le sustituyen los clásicos triángulos por dos corazones ensamblados. El Corazón Unificado, como el propio Cohen explicaría, corresponde a “una versión del yin y el yang, o cualquiera de los símbolos que incorporan las polaridades y tratan de reconciliar las diferencias.” La imagen del Corazón Unificado no solo llegó a ser una especie de sello o firma personal del artista que aparecería tanto de forma plástica como conceptual en todo su trabajo posterior a 1984, sino que además es el único elemento visual que fue grabado en la lápida de su tumba.
En 1984 Cohen publicó el álbum Various Positions, que incluía «Hallelujah», su canción más versionada. Cohen apoyó el lanzamiento de Various Positions con su gira más extensa a través de Europa y Australia, así como con las primeras fechas en Canadá y Estados Unidos desde 1975. La gira supuso su primera colaboración con Anjani Thomas, futura compañera sentimental y corista del grupo. El grupo tocó en el Festival de Jazz de Montreux y en el Roskilde Festival, y ofreció varios conciertos en Polonia, coincidiendo con el estado de Ley Marcial, en los que interpretó «The Partisan», himno del sindicato independiente Solidaridad.
En 1986 Cohen compuso la canción Take this Waltz para el album Poets in New York, un disco tributo a Federico García Lorca. La letra de la canción es una traducción del poema del propio Lorca titulado Pequeño vals vienés incluido en su libro Poeta en Nueva York. La canción del canadiense fue número uno en España en 1986. El álbum puso de nuevo a Cohen en la primera línea de la popularidad, y fue dedicado a su nueva compañera, la fotógrafa parisina Dominique Issermann.
En 1988, publicó I’m Your Man, un álbum auto-producido por Cohen y que fue uno de sus mayores éxitos comerciales.
A principios de los años noventa abandonó París y a Dominique Isserman para trasladarse a Los Ángeles, con la actriz Rebecca De Mornay, donde grabó el disco The Future (1992), inspirado parcialmente en los disturbios de Los Ángeles de 1992, que exhorta, a menudo en términos proféticos, a la perseverancia, la reforma y la esperanza ante sombrías perspectivas.
En 1993 publicó Stranger Music: Selected Poems and Songs, su primer libro de poemas en varios años, en el que había estado trabajando desde 1989.
En 1994, tras separarse de Rebecca, Cohen comenzó una reclusión en Mount Baldy Zen Center, un centro zen cerca de Los Ángeles. Dos años después, fue ordenado monje budista de la escuela Rinzai con el nombre de Jikan, que significa «silencio», y sirvió como asistente personal de Kyozan Joshu Sasaki.
Sin embargo, a pesar de los treinta años de estudio con Roshi, Leonard seguía tomando antidepresivos, y en los últimos días del gélido invierno de 1998 en Mount Baldy, volvió a hundirse. Se dirigió hacia la cabaña de Roshi y le dijo: “Roshi, tengo que irme. Voy a bajar de la montaña”. Roshi le preguntó: “¿Cuánto tiempo?”. Leonard le contestó: “No lo sé”. El anciano lo miró: “De acuerdo. Vete”
El 2 de febrero de 1999, Cohen llegó a Bombay para estudiar con Ramesh Balsekar, un hinduista de la escuela vedanta. No sabía cuánto tiempo iba a quedarse, pero fueron finalmente diez años los que pasó estudiando la doctrina advaita con su nuevo maestro: “De manera imperceptible, aquel fondo de angustia que me había acompañado toda la vida, empezó a disolverse”, reconocería el discípulo.
Tras abandonar su reclusión monástica, Cohen volvió al estudio de grabación en mayo de 1999. Tras dos años de producción, Cohen publicó en 2001 Ten New Songs, su primer disco en casi una década, con una fuerte influencia de la cantautora y productora musical Sharon Robinson. El álbum, grabado en los estudios personales de Cohen y Robinson, incluyó la canción «Alexandra Leaving», una adaptación del poema «The God Abandons Antony», del poeta griego Konstantinos kavafis.
En octubre de 2004, Cohen publicó Dear Heather, una colaboración musical con la cantante y compañera sentimental Anjani Thomas; Robinson también participó en tres canciones. Aunque no promocionó el álbum, publicó un video musical de la canción «Because Of» dirigido por su hija Lorca Cohen.
Una de sus últimas amantes conocidas fue Kelly Lynch, su representante durante 17 años. La misma que le traicionó y le dejó en la ruina. Un año después de que que el cantautor destituyese a Lynch como su manager éste le demandó alegando que ella le había robado cinco millones de dólares de sus cuentas personales y que le estaba acosando. «Mrs. Lynch me acusaba a diario de ser un drogadicto y muchas otras cosas. Por supuesto no me gustaba y sentí que mi reputación estaba siendo atacada», señaló en 2005. Ganó la batalla judicial, pero los abogados de la ex representante declararon que ella no tenía dinero para devolvérselo y Cohen nunca recuperó lo que era suyo. Tras esta tormentosa relación se vio obligado, con 70 años, a volver a los escenarios para poner en orden sus finanzas.
En 2006, tras diez años de retraso y reescrituras, Cohen vuelve al mundo literario con Book of Longing, dedicado al poeta Irving Layton. Las primeras 1500 copias vendidas a través de Internet y firmadas por el autor fueron vendidas en unas horas, convirtiéndose al poco tiempo en un best seller en Canadá. El 13 de mayo, hizo su primera aparición pública en trece años durante una firma de libros en una tienda de Toronto. Durante la firma, también cantó «So Long, Marianne» y «Hey, That’s No Way to Say Goodbye», acompañado de Barenaked Ladies y Ron Sexsmith.
El 13 de enero de 2008, Cohen anunció su primera gira mundial en quince años. Comenzó el 11 de mayo en Fredericton, Nuevo Brunswick y se extendió hasta noviembre de 2010.
En 2011 Cohen fué galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Letras en la 31.ª edición de los premios. Tras aceptar el premio, el músico donó los 50.000 euros del premio a la Universidad de Oviedo para impulsar una cátedra en su nombre. Este proyecto, singular y único en España, ha sido concebido como «un lugar de encuentro entre la poesía y la música, entre los creadores y su público, entre el arte y la sociedad«, tal como se recoge en el convenio firmado por el rector de la Universidad de Oviedo, Vicente Gotor, y por el artista Leonard Cohen.
El 31 de enero de 2012 Cohen publicó Old Ideas, su primer álbum en ocho años, cuya edición española incluyó una traducción libre de las letras realizada por el cantautor Joaquín Sabina, se convirtió en el mayor éxito comercial del músico,al alcanzar el primer puesto de las listas de discos más vendidos en casi toda Europa, Australia y EE.UU.. En agosto de 2012, Cohen se embarcó en una nueva gira mundial como promoción de Old Ideas.
En septiembre de 2014, coincidiendo con su octogésimo cumpleaños, publicó Popular Problems. Producido por Patrick Leonard y definido como «un retorno triunfal a la escena en vivo reflejado en el gutural aplomo de su voz», obtuvo un éxito similar al de Old Ideas dos años antes.
En 2016, Leonard Cohen lanza su decimocuarto álbum de estudio You Want It Darker, publicado por Columbia Records. El disco fue producido por el hijo del artista, Adam Cohen. En 2015, ya estaba gravemente enfermo, completamente inmovilizado en la cama, con múltiples fracturas en la columna vertebral -le habían diagnosticado osteoporosis-, aunque todavía emborronaba poemas para su libro póstumo, “La llama” (The Flame). En una entrevista concedida a la revista francesa Les Inrockuptibles en ese mismo año, declaró: “Si alguien pudiera garantizarme que los preliminares de la muerte no son demasiado desagradables, iría hacia ella ahora mismo”. Pero antes de marcharse, quiso despedirse de una de las mujeres que más vida y amor le habían dado: Marianne Ihlen estaba enferma de leucemia, y Leonard le escribió una carta: «Bien, Marianne, hemos llegado a este tiempo en que somos tan viejos que nuestros cuerpos se caen a pedazos; pienso que te seguiré muy pronto. Que sepas que estoy tan cerca de ti que, si extiendes tu mano, creo que podrás tocar la mía. Ya sabes que siempre te he amado por tu belleza y tu sabiduría pero no necesito extenderme sobre eso ya que tú lo sabes todo. Solo quiero desearte un buen viaje. Adiós, vieja amiga. Todo el amor, te veré por el camino»..
Su último disco, You Want It Darker, vería la luz el 21 de octubre de 2016. En el mismo participaba el coro de la sinagoga Shaar Hashomayim de Montreal -fundada por el bisabuelo de Leonard, Lazarus Cohen, a finales del siglo XIX.
El 7 de noviembre de 2016, Leonard Cohen murió durante su sueño, justo después de una caída en mitad de la noche, en su casa de Los Ángeles (California, Estados Unidos). Su hijo Adam declaró: «Mi padre murió en paz en su casa sabiendo que había grabado lo que él sentía era uno de sus mejores discos (You Want It Darker)». De acuerdo con sus deseos, fue enterrado en Montreal al lado de sus padres en un ataúd de pino sin adornos. Tenía 82 años.
Enlaces de interés :
La web oficial de Leonard Cohen en inglés, donde se encuentra toda la información referente a la obra completa del autor : https://leonardcohen.com/
«Leonard Cohen Files», una fuente en activo desde 1995 que contó con la supervisión del propio Cohen. La web ofrece acceso a filmografía, bocetos, fotos, análisis, álbumes de versiones y homenajes, poemas no publicados e información: https://www.leonardcohenfiles.com/
http://iesmanueldefallamaracena.com/wp-content/uploads/2022/06/Powerpoint-Cohen.pdf
https://www.elmundo.es/cultura/2014/09/23/541fee5fe2704ebc778b4573.html
https://theconversation.com/leonard-cohen-el-monje-que-amaba-a-las-mujeres-123617
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